Los alimentos nunca deben dejarse durante largos períodos de tiempo entre 10 y 63°C, ya que este es el rango de temperatura en el que los gérmenes pueden desarrollarse.
El respeto de la cadena de frío es, por supuesto, esencial, tanto para el transporte de las materias primas como para la entrega de las comidas y los productos terminados.
Para ustedes, profesionales, es importante tener herramientas eficientes para controlar la temperatura de cocción de sus productos, su enfriamiento, su transporte y su regeneración, etc…